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- “Dejémonos guiar por la sabiduría”, dijo el
Maestro.
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- “Los malos actos del pasado han dejado sus
semillas en nuestras mentes.
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- Si quemamos dichas semillas en el fuego de la
sabiduría, éstas se tostarán en él, tornándose estériles.
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- No podemos alcanzar la libertad, mientras no
hayamos quemado las semillas de las acciones pasadas en las llamas de la
sabiduría y de la meditación.
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- Si deseamos destruir los malos efectos de las
acciones pasadas, meditemos.
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- Aquello que hemos hecho, podemos también
deshacerlo.
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- Si, sin embargo nos vemos acometidos por las
pruebas, no estamos creciendo espiritualmente, y por lo tanto, debemos esforzaros más y más.
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- Una vez que nuestros esfuerzos presentes se vuelvan más poderosos que
el karma de nuestras acciones
pasadas, estaremos libres”.
