- Acharia
se hace eco de esta 'Carta
Abierta a
los Lectores de Acharia', enviada por
Soledad Cumbrera (Zhèng gĕng),
a propósito de las Fiestas Navideñas:
-
- Feliz
Navidad y Año Nuevo 2004
-
-
- Viernes,
12 de diciembre de 2003
-
- Querida
Maestra Hortensia:
-
- Esta
reflexión de Navidad es para todos los lectores de Acharia
en mi nombre y en el nombre de todos sus colaboradores.
-
- Cariños,
Soledad Cumbrera (Zhèng gĕng)
-
-
- Cuando
nos veamos otra vez la víspera de Navidad para la celebración del sagrado
nacimiento de Jesús, hagámoslo en paz y con una buena vibra y una mente
feliz. Pienso que eso sería maravilloso. Sería tan triste el pasar la
celebración con una mala disposición y enojado. En lugar de eso, asistan
con una hermosa motivación y mucho amor.
No tengan discriminación alguna, sino vean todo como una flor de
oro, incluso a su peor enemigo. Entonces la Navidad, que produce tan a menudo una mente
agitada, llegará a ser hermosa.
-
- Cuando
cambian su actitud mental, la visión externa también cambia. Este es un
verdadero giro mental. No hay duda sobre esto.
No soy alguien especial, pero he tenido experiencia en hacer esto y
funciona. Ustedes son personas inteligentes, por lo tanto pueden entender
como la mente tiene la habilidad de cambiarse a sí misma y a su ambiente.
No hay razón por la que este cambio no sea para mejorar.
-
- Algunos
de ustedes pueden pensar, "Oh, yo no quiero
tener nada que ver con Jesús, nada que ver con la Biblia." Esta es una
actitud de aversión hacia el Cristianismo. ¡Si realmente entendieran,
reconocerían que lo que Jesús enseñó fue "amor!"
Tan simple y tan profundo como eso. Si tuvieran amor verdadero dentro de
ustedes, estoy seguro que ustedes se sentirían mucho más pacíficos de cómo
ahora se encuentran.
-
- ¿Cómo
ustedes piensan de manera cotidiana en el amor?
Sean honestos. ¿Siempre
está lleno de discriminaciones, no es así?
Sólo observen al alrededor de este cuarto y vean si consideran a
alguna persona aquí es un objeto de su amor. ¿Por qué discriminan tan
agudamente entre el amigo y el enemigo? ¿Por qué ven una diferencia tan
grande entre ustedes y los otros? En la enseñanza budista, esta actitud de
falsa discriminación se le llama dualismo.
Jesús dijo que tal actitud es lo contrario al amor verdadero. Por lo
tanto, ¿hay alguno de nosotros que tenga el amor puro de que Jesús hablaba?
Si no lo tenemos, no debemos criticar sus enseñanzas o sentir que son
irrelevantes para nosotros. Nosotros somos los que hemos entendido mal, quizás
conociendo las palabras de sus enseñanzas, pero nunca actuando sobre ellas.
-
- Hay
muchas oraciones hermosas en la Biblia, pero no recuerdo leer que Jesús haya dicho que sin hacer algo, cualquier cosa
– sin prepararse de alguna manera, sin esforzarse - ¡El Espíritu Santo descendería
sobre ustedes, whoosh! (...
desde entonces el reino de Dios es anunciado, y quienquiera 'que se
esfuerce' entrará en él. Lucas 16:16).
Si ustedes no actúan de la manera que él sugirió que ustedes deben
actuar, no hay ningún Espíritu Santo existente para ustedes.
-
- Lo
que he leído en la Biblia tiene la misma connotación que las enseñanzas
budistas referentes al equilibrio, la compasión y cambiar nuestro apego al
ego en el amor para otros. Es
obvio que no puede ser inmediatamente el entrenar su mente para desarrollar
estas actitudes, pero ciertamente es posible hacerlo. Lo que no nos permite
hacerlo es nuestro egoísmo y nuestra mente cerrada.
-
- Con
realizaciones verdaderas, la mente deja de ser egoísta preocupándose sólo
por su propia salvación. Con amor verdadero, uno no se comporta de manera
dualista; sintiéndose muy
apegado a ciertas personas, distante de otras y totalmente indiferente del
resto. Es muy simple. En la personalidad ordinaria, la mente se divide
siempre contra sí misma, siempre luchando y disturbando su propia paz.
-
- Las
enseñanzas en amor son muy prácticas.
No pongan a la religión en alguna parte allá arriba en el cielo y a
ustedes aquí abajo pegados en la tierra. Si las acciones del cuerpo,
palabra y mente vienen de la bondad amorosa, ustedes se convierten automáticamente
en una persona verdaderamente religiosa. Ser religioso no significa asistir
a ciertas enseñanzas. Si ustedes escuchan las enseñanzas y las
malinterpretan, de hecho son lo contrario de lo que es ser religioso. Y es
solamente porque ustedes no entienden cierta enseñanza que ustedes abusan
de la religión.
-
- La
carencia de la comprensión profunda conduce a ser partidarios. El ego
siente, "Yo soy budista, por lo tanto todo el Cristianismo debe de
estar mal." Esto es muy dañino si nos referimos a la verdadera sensación
religiosa. Una religión no se destruye con bombas, sino con odio. Y lo más
importante, se destruye su propia paz mental. No importa si ustedes expresan
su odio con palabras o no. Los meros pensamientos de odio destruyen automáticamente
su paz.
-
- De
manera similar, el amor verdadero no depende de la expresión física.
Ustedes deberían darse cuenta de esto. El verdadero
amor es una sensación profunda dentro de ustedes. No es cuestión
tener una sonrisa en la cara y de parecer feliz. Sino que, surge de una
comprensión de corazón del sufrimiento de cada ser y se irradia hacia a
ellos indistintamente. No favorece a algunos cuantos elegidos y excluye a
los demás.
-
- Además,
si alguien los golpea y ustedes reaccionan con cólera o gran alarma,
llorando, "¿Qué me ha sucedido?" Esto
tampoco tiene nada que ver con una mente que sabe el significado del
verdadero amor. Es solamente
una preocupación ignorante del ego por su propio bienestar. Es mucho más
sabio darse cuenta que "El ser golpeado realmente no me daña. Y que mi
propio engaño del odio es realmente el enemigo que me daña mucho más."
El reflexionar
de esta forma, permite que el verdadero amor crezca.
-
-
- "No
hay ninguna dificultad cuando se trata del Camino Perfecto.
- Sólo
que debemos evitar el hacer discriminaciones.
- Cuando
estamos libres del odio y del amor,
- Eso
se revelará a sí mismo tan claro y amplio como la luz del día."
-
- Seng Ts'an
-
-
- Deseándoles
a Todos la Paz Divina Ahora y Siempre
-
-
- ¡Feliz
Navidad
y Año Nuevo!
-